Cobrar los rendimientos de una cuenta, depósito o fondo será más rentable a partir del 1 de enero de 2016, cuando entren en vigor la nueva rebaja en los rendimientos de capital mobiliarios recogidos en la reforma fiscal. Sólo el comienzo de la batería de descensos que están preparando las entidades.
Una de las medidas que adoptó Mariano Rajoy cuando alcanzó la presidencia fue la subida de los impuestos al ahorro, dentro de la batería de decisiones para rebajar el déficit. Sin embargo, ahora que la recuperación económica ya es un hecho toca rebajas, de las que se beneficiarán los ahorradores el próximo año. Especialmente será beneficioso si tenemos en cuenta que las rentabilidades de depósitos cotizan a la baja en plena prorrogación del QE y rebaja de la facilidad de depósito al -0,3% por parte del BCE.
Menos retención
Todos los depósitos y cuentas que se liquiden a partir del 1 de enero de 2016 aumentarán su rentabilidad respecto a los que lo han hecho a lo largo de 2015 vía impuestos. Se trata de una rebaja de medio punto, ya que a mediados de año se adelantó la entrada de nuevos tipos y los rendimientos que se liquidarán a partir de junio se hicieron al 19,5% hasta intereses de 6.000 euros. A partir de enero, todas las retenciones caerán medio punto.
La reducción se aplica a los tres tramos de ganancias que contempla la regulación. A los primeros 6.000 euros de intereses se les aplicará en 2016 un tipo del 19%, entre los 6.000 y los 50.000 se sitúa en el 21% y a partir de los 50.000 salta hasta el 23%.
Así, para un depósito de 10.000 euros a un tipo del 1,30%, la retención fiscal actual es del 25,35 euros y a partir del 1 de enero de 2016 será de 24,7 euros. Apenas unos céntimos de ahorro.
FUENTE: ABC