La nueva entidad resultante
de la mayor compra-fusión bancaria en España en las últimas dos décadas,
mantendrá la marca CaixaBank, y pasa a convertirse en el primer grupo
bancario en España por delante del Santander y el BBVA, y el décimo de Europa.
Estas son algunas de sus
cifras, nace con 20 millones de clientes, con unos activos de más de
664.027 millones de euros (el 25% del sector), más de 6.700 sucursales (el 28%
del total) y 51.500 empleados (el 29%), y presencia en más de 2.200 municipios
de toda España.
Esta fusión por absorción
con un canje de acciones que se ha comunicado a la CNMV y que se
ha fijado en 0,6845 acciones de la nueva CaixaBank por cada una de Bankia,
hace que en la nueva entidad, CaixaBank represente el 74,2%, mientras que
Bankia representará el 25,8%.
Criteria, rama inversora de
la Fundació Bancària La Caixa, pasará a controlar el 30% del nuevo banco. Para
conseguirlo, Criteria deberá comprar 25 millones de acciones por unos 50
millones de euros. El organismo público Fondo de Reestructuración Ordenada
Bancaria (FROB) se quedará con el 17% del capital.
Se calcula que los ahorros de
costes serán de 770 millones anuales, mientras que los costes de
reestructuración serán de 2.200 millones. Gran parte de esos costes se
destinarán al recorte de la capacidad instalada y el ajuste de personal. Los
sindicatos calculan que hay entre 7.500 y 10.000 personas en edad de ser
prejubiladas en los próximos años. Aunque Gonzalo Gortázar, Consejero Delegado
de la nueva entidad, ha apelado a la imaginación para que el reajuste no
se base únicamente en prejubilaciones.
La presentación del proyecto
de fusión, aprobado por los consejos de administración de cada uno de los
bancos el pasado jueves en Valencia, la llevaron a cabo los dos hombres fuertes
del nuevo banco, el Consejero Delegado, Gonzalo
Gortázar,
y el nuevo presidente José Ignacio Goirigolzarri,
éste último aseguró que la fusión era la mejor opción para todos, incluido el
FROB. El banco tendrá su sede social en Valencia y las operativas en Barcelona
y Madrid
Desde la asociación de
consumidores Facua se alerta de los posibles efectos
nocivos que podría suponer para los consumidores esta concentración bancaria,
que redundaría en el cierre de oficinas y puede resultar
en mayores comisiones y una peor atención a
los usuarios.
Otro punto controvertido para algunos sectores de la sociedad es que el Estado solo ha recuperado unos 3.000 millones de los 24.000 inyectados en Bankia para salvar la entidad durante la anterior crisis financiera. Al respecto de esta cuestión del retorno de las ayudas del Estado, el vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, ha minimizado la cuestión y ha defendido que aquel rescate se hizo para "cubrir pérdidas del pasado". De Guindos ha argumentado que como ex ministro de Economía y como responsable del programa de banca en el 2012, el rescate a Bankia salvó a depositantes y a la economía, por lo que ante la pregunta de cuánto dinero se va a recuperar "hay que responder mirando desde esta consideración".
FUENTE: ADADE CENTRAL