España ocupa el puesto 33 en el Índice de facilidad para hacer negocios que elabora el Banco Mundial y que analiza los procesos y normas gubernamentales que un emprendedor ha de seguir para poner en marcha una nueva empresa. En esta lista, liderada por Singapur, destacan países europeos como Noruega, Finlandia o Reino Unido.
Crear una nueva empresa en España requiere el doble de trámites y tiempo empleado que en los países con mayores ingresos de la OCDE, según recoge la plataforma de crédito online Spotcap. Solo poner en orden la documentación requiere una inversión de al menos 4.000 euros, a lo que hay que sumar los costes librados por los bienes físicos necesarios o por la contratación de personal.
Cómo financiarse para emprender
Conseguir financiarse no es fácil para los emprendedores españoles. Si comparamos las dificultades a las que hay que enfrentarse en nuestro país con las de Estados Unidos, se puede comprobar que en el gigante americano existen mayores facilidades debido a la simplificación del acceso y al establecimiento de un sistema más directo para el establecimiento de negocios.
Estos son algunos de los modelos de financiación que se pueden seguir en España para sacar adelante una startup:
'Venture capital'
Es una rama del capital riesgo que se enfoca en etapas tempranas de negocio. En 2015 la inyección de recursos internacionales en proyectos emprendedores españoles a través de este método ascendió a los 395 millones de euros.
'Business angels'
Este sistema se basa en el apadrinamiento de proyectos. Inversores aportan capital, experiencia y contactos a los emprendedores con la intención de obtener una ganancia futura. La inversión oscila entre los 25.000 y los 250.000 euros que se inyectan en empresas en fase de desarrollo o expansión.
'Crowdfunding'
El micromecenazgo se ha convertido en una opción muy recurrente para los pequeños emprendedores. Se trata de un modelo de recaudación de capital que, sin intermediarios permite a los creadores de la startup conseguir el dinero para sacar adelante sus proyectos a través de la financiación mancomunada de pequeños prestamistas independientes.
Créditos ‘online’ o préstamos sin pasar por el banco
Otra de las opciones son los préstamos online. Se trata de la cesión de dinero por parte de entidades prestamistas que trabajan fuera de la banca y que, a cambio de unos intereses, ofrecen liquidez a los emprendedores.
FUENTE: 20 MINUTOS